Mestres y Doctores con diploma en el exterior buscan revalidar su título en Brasil
En la Universidad de Brasilia (UnB), maestros y doctores acampan cerca de la rectoría. Ellos obtuvieron el título en el extranjero y desean revalidar su diploma para ser reconocidos en Brasil. Esta no es una manifestación. Una vez por semestre, se pueden ver tiendas de campaña en fila para asegurar los primeros lugares en la fila. La UnB solo acepta seis procesos de maestría y seis de doctorado para cada uno de los 86 programas de posgrado. Aquellos que no logran ingresar en este grupo deben esperar otro semestre.
La revalidación de diplomas es llevada a cabo por todas las instituciones públicas de enseñanza con programas de posgrado y algunas privadas. Sin esta revalidación, aquellos que estudiaron en el extranjero no pueden enseñar o realizar investigaciones que requieran un título. Tampoco tienen su nivel reconocido en concursos o promociones salariales.
Aunque no hay un número oficial, según la Asociación Nacional de Postgraduados en Instituciones Extranjeras de Educación Superior (Anpgiees), alrededor de 20.000 personas han iniciado el proceso y están a la espera de que se revalide su diploma. Cada institución define los requisitos para la revalidación y cobra una tarifa que supera los R$ 1.000. El tiempo para la revalidación también varía. Según el presidente de Anpgiess, Vicente Celestino de França, el proceso que debería durar seis meses puede tomar hasta dos años e incluso diez. Aquellos que dejaron a sus familias y gastaron gran parte de sus ahorros para estudiar en el extranjero se quejan de la negligencia y las dificultades para que se reconozcan sus diplomas.
La UnB comenzó a recibir solicitudes de revalidación el lunes pasado. En los primeros días, se presentaron 30 solicitudes. Los cupos para educación, derecho y administración ya están completos. La universidad aceptará solicitudes hasta octubre. La restricción de cupos se decidió para cumplir con el plazo de seis meses y poder atender la demanda.
Sin embargo, muchos se quedan fuera del proceso. Este es el caso de Vanderlan Bittencourt Rodrigues, quien se graduó en química en la UnB y realizó una maestría en educación en Asunción, Paraguay. Regresó a Brasil y lleva dos años intentando revalidar su título. Para evitar hacer fila en la UnB, Vanderlan buscó otra institución. Ya ha presentado todos los documentos necesarios, pero siempre hay algo que falta. “Al principio del proceso, no sabía que iba a tener tanta dificultad”, comenta.
“Fue un gran esfuerzo terminar la maestría. Estudié mucho. Aprobé todas las asignaturas y en el periodo de orientación, cuando se lee la tesis, se puede ver la seriedad con la que se trató el estudio”. Rodrigues presentará una nueva solicitud de revalidación en otra universidad. Quiere tener su título de maestro.
Por ley, aquellos que recibieron becas del gobierno, como los estudiantes de doctorado del programa Ciencia sin Fronteras (CsF), deben someterse al proceso de revalidación. La Ley de Directrices y Bases de la Educación Nacional (Ley 9.394/96) establece que los diplomas solo pueden ser reconocidos por universidades que tengan programas de posgrado reconocidos y evaluados en el mismo campo de conocimiento, a un nivel igual o superior.
La supuesta falta de equivalencia con el curso ofrecido hizo que Denir Machado no obtuviera el reconocimiento de su título de maestría en administración de empresas de la Universidad de Durham, en Reino Unido. Presentó una solicitud en la Universidad Estatal de Londrina (UEL). Para proporcionar toda la
