Aprobado en 2008, el Fondo Mercosur para Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Fondo Pymes) deberá entrar en funcionamiento en el próximo año. El Fondo será un instrumento de los países miembros del Mercosur – Brasil, Venezuela, Argentina, Uruguay y Paraguay – y tiene como objetivo garantizar operaciones de crédito para financiar proyectos de integración productiva.

El Fondo Mercosur respaldará operaciones y garantías de crédito (segundo piso) firmadas tanto por instituciones financieras como por entidades nacionales de garantía. En el caso de Brasil, las sociedades de garantía de crédito (SGC) podrán establecer convenios directamente con el operador del Fondo.

El gobierno brasileño estima que las reservas del Fondo Mercosur, formado a partir de las contribuciones de los países miembros, puedan alcanzar los US$ 127 millones. “La confirmación de la contribución brasileña dependerá de la aprobación del Poder Legislativo de los países miembros, que evaluará el reglamento del Fondo en el segundo semestre de este año. Después de la aprobación del Congreso Nacional, este gasto será incluido en el Presupuesto General de la Unión”, proyecta Rafael Quirino Santos, asesor de la Secretaría de Asuntos Internacionales del Ministerio de Hacienda.

Integración regional – El objetivo político del Fondo Mercosur es crear y ampliar la capacidad productiva de las pequeñas y medianas empresas que sean de interés de dos o más países del Mercosur. Es por esta razón que los recursos del Fondo se destinarán principalmente a proyectos de integración productiva, creación de joint ventures y operaciones de comercio exterior en el ámbito del Mercosur.

En el caso de los municipios ubicados en las regiones fronterizas, todas las operaciones de crédito de las pequeñas empresas podrán ser garantizadas con los recursos del Fondo. “Independientemente de la categoría de la operación de crédito, las micro y pequeñas empresas de Foz do Iguaçu, entre otras ciudades fronterizas, tendrán la posibilidad de utilizar el Fondo para operaciones de inversión en capital fijo, activos intangibles y capital de trabajo”, ejemplifica Rafael Santos.

Las principales beneficiarias del Fondo Mercosur serán las micro, pequeñas y medianas empresas de la región Sur del país. Sin embargo, las empresas brasileñas que mantienen algún tipo de relación con empresas de países del Mercosur también podrán ser atendidas por el Fondo. “Los proyectos de energía eólica en el Noreste y los arreglos productivos de gas y petróleo en la Cuenca de Campos se incluyen en esta situación”, recuerda Paulo Alvim, gerente de la Unidad de Acceso al Mercado y Servicios Financieros del Sebrae Nacional.

En este momento, el Mercosur está elaborando el manual operativo del Fondo Mercosur y todavía hay una serie de cuestiones que no están definidas, como el valor de las tasas de comisión. También se discuten otras cuestiones como el proceso de enquadramento de las operaciones de crédito, las normas relativas a garantías reales y de honor, y la relación del operador del Fondo con las garantías de crédito e instituciones financieras. “Lo que podemos adelantar es que las tasas para las operaciones de segundo piso serán competitivas y más atractivas en comparación con las que se practican actualmente en el mercado”, asegura Rafael Santos.

Evaluación de las SGC – El anuncio presentado por el representante del Ministerio de Hacienda durante el tercer Encuentro Sebrae y Sociedades de Garantía de Crédito en Campina Grande fue bien recibido por los líderes de las garantías de crédito del país. “Creo que el Fondo Mercosur puede mejorar nuestra relación con los bancos comerciales. Por lo tanto, necesitamos coordinarlos para que estos recursos no se canalicen a las instituciones financieras”, adelanta Angelo Mestriner, presidente de Garantiserra.

La preocupación planteada por el líder de la garantía de crédito de la Sierra Gaúcha es válida. “Es importante que las SGC se organicen para utilizar los recursos del Fondo, de lo contrario serán ofrecidos a las instituciones financieras”, advirtió Arthur Koblitz, economista de la División de Crédito para Exportaciones del BNDES durante el taller de Campina Grande. El BNDES también participa en el Grupo Técnico responsable de la elaboración del manual operativo del Fondo Pymes.

La evaluación positiva también es compartida por Garantioeste. “Los recursos podrán ser utilizados para el apalancamiento de operaciones de segundo piso. Esto es importante para nosotros porque queremos aumentar nuestro apalancamiento. Será posible, entonces, atender a más empresarios de pequeñas empresas de la región”, apuesta Odanir Guerra, director ejecutivo de SGC del oeste de Paraná.