Cerca de 20 jefes de Estado y de Gobierno se reunirán el viernes y el sábado en la ciudad española de Cádiz para la XXII Cumbre Iberoamericana, que tendrá como tema principal la crisis económica en Europa y su repercusión en una América Latina en pleno crecimiento.

España, anfitriona del encuentro y país fuertemente afectado por la crisis, buscará ceder el papel protagónico que ha tenido en la cumbre desde su creación en 1991. El país, en pleno esfuerzo de austeridad, encuentra dificultades para seguir financiando en un 60% a la Secretaría General Iberoamericana (Segib).

‘Debemos tener en cuenta las transformaciones en América Latina, pero también en Europa y en España’, explicó a AFP Carlos Malamud, experto en Comunidad Iberoamericana del Instituto Real Elcano de Estudios Internacionales y Estratégicos de Madrid.

El año pasado, la reunión se vio marcada por la ausencia de varios líderes políticos, lo cual no se repetirá esta vez: sólo los presidentes de Venezuela, Cuba, Argentina, Guatemala y Paraguay faltarán al encuentro, este último debido al conflicto con sus socios del Mercosur y Unasur tras la destitución de Fernando Lugo en junio.

Para el Rey Juan Carlos, quien siempre ha tenido un papel diplomático importante en las reuniones, el objetivo es ‘mejorar los mecanismos de diálogo entre los países y aumentar la integración y la cooperación’.

Con una tasa de desempleo del 25% en España y una economía que no logra recuperarse, las empresas españolas dependen cada vez más de sus negocios en América Latina. Por ejemplo, Telefónica obtuvo un beneficio neto de 1,380 millones de euros en el tercer trimestre gracias a sus actividades en el continente, donde por primera vez obtuvo mayores ganancias que en Europa.

Sin embargo, con economías basadas principalmente en la exportación de materias primas, los países latinoamericanos podrían sufrir las consecuencias de la recesión europea si esta se prolonga, advirtió Enrique Iglesias, secretario general de Segib.

‘Es necesario estar atentos a los riesgos asociados a la deterioración de la crisis o a una recuperación demasiado lenta en la zona euro’, informó.

Mariano Rajoy, jefe de gobierno español, aprovechará la cumbre para conversar con los líderes de América del Sur sobre la situación de crisis en la zona euro, según Jorge Moragas, jefe de gabinete del primer ministro español.

La seguridad jurídica también será tema de discusión en la cumbre, después de la expropiación de la petrolera YPF por parte de Argentina y las cientos de empresas ‘multi-latinas’ con intereses en todo el continente, anunció Malamud, quien recordó otras nacionalizaciones como la de la empresa mexicana Cemex en Venezuela y la de Petrobras en Bolivia.